domingo, 1 de abril de 2012

Estudio de resonancia magnética para rastrear “caminos” del cerebro

El mapeo de resonancia magnética más preciso en un cráneo humano jamás se ha hecho hasta la fecha; neuro-científicos de los Estados Unidos presentaron un estudio en la revista "Science", acerca de un nuevo tipo de resonancia magnética que permite describir la estructura neuronal que se ve en los cerebros de los humanos y algunas especies de monos.

Los científicos fueran capaz de ver las fibras nerviosas a través del cual las neuronas transmiten los impulsos en la imensa rede de caminos del cerebro.

¿Qué podría ser una maraña de alta complejidad, sin embargo, resultó algo muy organizado.

Es como si, en vez de callejones y callejuelas del centro de las ciudades viejas, el cerebro había planeado avenidas paralelas que abarcan la extensa malha neural.

En los cerebros de los seres humanos y algunas especies de monos los patrones de humanos y simios son muy similares.

La máquina que le permitió ver los detalles de la orden de un milímetro en el cerebro (una resolución diez veces mejor que un equipo de buen hospital) fue producido por científicos del Hospital General de Massachusetts (EUA), junto con la empresa alemana Siemens. La tecnología utilizada fue una mejora de un tipo de imagen de resonancia magnética.


El estudio sobre los primeros resultados obtenidos con la nueva tecnología fue dirigido por Van Wedeen, un científico de Harvard Medical School. Dijo que el hecho de las fibras del cerebro se organizan en un relativamente simple no quiere decir que hay un patrón complejo en las conexiones entre las neuronas. Estas células individuales, sin embargo, todavía no puede ser visto por una técnica no invasiva, tales como resonancia.

"La conectividad real es más compleja que la red de fibras que estamos viendo ahora, pero no sabemos cuánto más complejo", dijo el investigador.

Una buena cantidad de dinero para la investigación provino del Programa de Conectoma Humanos, cuyo objetivo es crear tecnologías de imagen cerebral no invasiva del cerebro capaz de ver los patrones útiles para la psiquiatría. No es una tarea sencilla, y todavía está lejos de se resultar factible, reconoce Wedeen.

"Los científicos con una buena máquina de resonancia magnética funcional hoy en día se puede diferenciar una población de personas con depresión en una población de personas no deprimidas, pero depende de las estadísticas", explica. "No es posible diferenciar a una persona con depresión en una persona sin la enfermedad."

Para compensar la falta de precisión, el proyecto conectoma también pretende analizar con más detalle la estructura del cerebro humano y a la influencia que las diferencias en el ADN de la gente tiene sobre el cerebro.

Para Wedeen, el proyecto es una apuesta "arriesgada" porque no se sabe si el conocimiento adquirido será lo suficientemente confiable para su uso clínico.

Pero es un gran paso en esa dirección

(Filosofya y Neurociencia ) 

No hay comentarios:

Publicar un comentario